lunes, 14 de marzo de 2011

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Hoy me ha escrito un correo mi ingeniera y amiga Elena retándome a escribir su propio blog, en un día, hoy, en el que en el mundo anglosajón parece ser que es 3,14 y no 14 del 3, es decir, el día del número "pi".

Algo de eso debe haber, yo odio el número 14, y hoy se ha parecido más a un 3 que a un innombrable catorce.

Titulaba su correo "Un poquito de matemáticas" y en el enlace que me manda:

http://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_de_%CF%80   

encontraréis toda la información sobre este día, efectivamente, tan matemático.  En el blog que parece que va a inaugurar para,  textualmente,  "contraatacar a Sonia y sus efémerides poéticas con otras más mundanas" podremos encontrar también cosas como estas,

http://www.pianomundo.com.ar/rockpop/pi-piano/ 

donde los mil primeros números digitales de "pi" pueden representarse en un piano.  Julián, seguro que esto te interesa.  Vaya colgados, de todas maneras, ¿no?

Pero...
No estamos en el mundo anglosajón, o no todavía, o no del todo.  Y hoy también celebramos que nació Théodore de Banville, un poeta francés precursor del Parnasianismo, y al que le debemos alguna edición de Las flores del mal, de Charles Baudelaire.

A Theodore de Banville

De la Diosa empuñasteis la espesa cabellera,
Con vigor tal, que todos os hubieran tomado,
Al ver ese aire altivo y ese hermoso abandono
Por un joven rufián que golpease a su amante.

La mirada incendiada por un fuego precoz,
Vuestro orgullo de artífice sin pudor exhibisteis,
En esas construcciones, cuya audacia correcta,
Anticipa los frutos de vuestra madurez.

Poeta, nuestra sangre por cada poro escapa.
¿Tal vez por un azar, la veste del Centauro,
Que cada vena en fúnebre arroyo transformó,

Fue tres veces teñida en las sutiles lavas,
De aquellos monstruosos reptiles vengativos,
Que Hércules en su cuna un día estrangulara?

Charles Baudelaire.

Vosotros haced lo que queráis pero seguro que si preferís seguir el inminente blog matemático-tencológico de Elena, tendréis que escuchar a Los Planetas.  Vosotros mismos.

Yo prefiero irme a la noche, a su recogimiento y a París.

Recogimiento

Cálmate, dolor mío, y tu angustia serena.
Anhelabas la noche. Ya desciende. Aquí está.
Una atmósfera oscura cubre a París. Traerá
a unos cuantos la paz, a otros muchos la pena.

Mientras la muchedumbre que se rinde al placer,
­su verdugo inclemente­ por las calles anhela
cazar remordimientos bajo la fiesta en vela,
Tú, dolor, ven a mí. Dame la mano al ver

que es posible escaparse de los ya muertos años
con sus antiguos trajes en el balcón celeste.
Ya brotan, como salen del mar, los desengaños,

cuando el sol, bajo un arco, se muere en lontananza.
Ahora, tal un sudario que desciende del este.
Observa, mi dolor: la inmensa noche avanza.

Charles Baudelaire.

5 comentarios:

  1. Pues, por alusiones, no tengo más remedio que publicar mi primer comentario. Casi sin tiempo para escribir, mucho menos para pensar.

    Hoy también hace años que nació otro poeta, a su modo, Albert Einstein.

    Os dejo un par de frases suyas:
    "Todos somos muy ignorantes. Lo que ocurre es que no todos ignoramos las mismas cosas."

    "Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo."

    Para variar y ser un poquito menos ignorante, esta noche leeré poesía.

    Un beso.

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  2. Estoy completamente de acuerdo con las dos frases que nos manda Elena. Es un lujo descubrir cosas nuevas, como el día del número "pi", como que ayer nació Einstein. Es un lujo conocer gente que te aporta tanta cosas nuevas y que no tienen miedo a lo que no conocen. Yo he aprendido muchas cosas al lado de Elena y no se ciñen a ningún ámbito académico, sobre todo a quererla, aunque eso no tiene mucho mérito, es muy fácil. Tú no podrías ser ignorante, amiga, te encanta contaminarte.

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  3. Allá voy!, espero ser capaz de colgar el comentario.
    Hoy, esta conjunción Elena-Sonia, me hace recordar a mi profesor de matemáticas de COU. No recuerdo su nombre, pero era uno de los pocos profesores jóvenes que tuve en el bachillerato, y me hizo ver las matemáticas con otros ojos, consiguiendo que casi me gustasen. Bueno al grano´. Este profesor nos contó, y nos demostró que el lenguaje eran matemáticas y que la relación entre ambos era tan íntima que se necesitaban para existir. No recuerdo la teoría pero me dejó claro que las palabras, la sintaxis, la métrica....se estructuraban de forma matemática. Me enseñó más cosas, lástima que los derroteros que elegí me alejaran de ellas.

    15 de marzo de 2011 00:30

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  4. Recomiendo la película "Pi" de Aronofsky. Poe, Borges (y la cábala), Kafka, son las influencias voluntarias o involuntarias de este magnífico y alucinado triller matemático.

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  5. Querido Crispín!!! Cuánto me alegra leerte!
    Apunto la peli, la veré y te diré. Te veo ya pronto en el Juanelo...
    Aprovecho ya para dar las gracias a todos los que colaboráis con los comentarios, Amparo, Luisa, Luix, Elena, Samuel, Max, y animo al resto a participar. Me encanta leeros y saber que estáis por aquí.
    Lo que ha dado de sí el número pi...
    Un beso a todos. Y muchas gracias.

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